¿Aceite?....¡del mejor! II


En los 50 el país pasaba por ciertas restricciones en la importación de insumos considerados estratégicos, uno de ellos eran los aromatizantes para los aceites lubricantes de uso general y en especial para automotores,sin ellos los aceites no veían disminuida su calidad fundamental como lubricante, pero si, la presentación, puesto que la carencia de aromatizantes, hacía que los lubricantes, tuviesen un olor sumamente desagradable,que la mayoría de la gente,lo relacionaba con la baja calidad del mismo, más por tratarse de aceites producidos por la empresa estatal,no era fácil para los vendedores del producto, vencer la desconfianza de la gente,hasta que, el azar vino en su ayuda.
Por esos años se corría la ya Tradicional Competencia de Turismo de carretera,la ”Vuelta de Olavarria”.En un circuito,con largada en Olavarria,en dirección a Azul,en Chillar se bajaba a la tierra,hacia 16 de Julio y de alli a Olavarria,eran cinco vueltas.La tradicional rivalidad de los “Gringos de Olavarria” vs. los Gálvez, estaba en pleno apogeo,en la carrera del 55,primera vuelta, los “gringos” que habían partido en tercer lugar, habían llegado primeros a Chillar,escoltados por Juan Gálvez; pero luego, perforaron un pistón.
A punto de abandonar, decidieron continuar en siete cilindros,perdieron la punta;pero seguían ahí nomás y, a la postre terminarian segundos,detrás del ganador Menditeguy.
 Eso sí, con un gran consumo de aceite.
El "Valvulas a la Cabeza" Izq y Der.Torcuato y Dante
En Chillar, al bajar la loma lo primero que se veia era una gran humareda blanca, luego, se detenían sobre el paso a nivel de la Ruta 3 para, cargar una lata de veinte litros de aceite,vuelta tras vuelta,justamente del aceite del cual todos desconfiaban.Asi, en los días sucesivos, Don Antonio Flecha,Agente Oficial YPF,en su salsa,no se cansaba de repetir y destacar ,¿Vieron?, Yo les decia...., a quien quisiera oirlo, de las bondades del aceite,demostradas nada menos que en un auto de carrera,hecho potenciado,por que los Emiliozzi,ya le hacían publicidad a otro aceite, y en su taller de Olavarria,tenian innumerables latas en stock;sin embargo prefirieron ese y lo siguieron prefiriendo a lo largo de toda su trayectoria, a pesar que el de la publicidad lo obtenían gratuitamente y el otro lo debían comprar,lo cual, era una confirmación más de la calidad del producto.-