El Día de los Muertos




En nuestra infancia era uno de los días festivos de mayor convocatoria familiar y movilización  popular.Su festividad era precedida por la recordación de Todos los Santos, el 1º de noviembre, una celebración menor en comparación con la del día 2, Día de los Muertos, día designado en la Iglesia Católica para la conmemoración de los fieles difuntos.ambos días eran no laborables.Las costumbres hacían que  el día 1º de noviembre se fuera  a la Iglesia y que el día 2  se lo hiciera al cementerio. La tradición de asistir  al Cementerio a rezar por las almas de quienes ya abandonaron este mundo, era acompañada de un profundo sentimiento de devoción, en la convicción de que el ser querido que se marchó  pasó a una mejor vida.Una asistencia que exigía una preparación con mucha anticipación,no había flores artificiales por entonces ,por lo cual había que requerir de los servicios y habilidades manuales que pocas personas  poseian,una  de ellas mi madrina Doña Lucia Cristino,por esos días dejaba la costura aun lado y se dedicaba a cumplir con los encargos de todo el vecindario,el papel creppe con su variedad de colores-que la Librería de Pagella hacia buen  acopio para la ocasión-en sus hábiles manos mágicamente se transformaba en rosas,claveles ,gladiolos, calas etc. que pasaban a dar forma a  ramos y  coronas de todos los tamaños, que llegado el día eran complementados con una buena provisión de flores naturales surtas de los jardines caseros.



Llegado el día, la mañana era  el turno de los hombres,adelantados para realizar tareas de mantenimiento,dezmalezamiento,reparaciones de mampostería, pintado etc,mientras que apenas pasado el horario del almuerzo,de un dia que solia ser de sol radiante y  muy caluroso, el grueso de las familias se movilizaban  desde todos los rincones del pueblo y alrededores encaminándose hacia el Cementerio Viejo,(x) unos pocos en automóviles,otros en carruajes y/o sulkys ,pero la mayoría a pie,recorriendo parte del trayecto por las calles del pueblo,para luego pasando la quinta de Cottone cortar camino yendo  a campo traviesa,subiendo la loma ,una vez llegados a  su  cúspide,podiamos ver el cementerio en una  hondonada lejana.Para quienes éramos niños se nos ocurría que quedaba muy distante y a trasmano y en verdad lo estaba,siendo esa una las causas que llevo a la creación de un Nuevo Cementerio  un tanto mas cercano y de mejor accesibilidad.La convergencia simultanea de una multitud de gente complementada con la presencia del Padre Carballo con los chicos de la Parroquia y de las Hermanitas de Cristo Rey con las niñas del asilo configuraba una imagen muy particular , un escena  única, aislada visualmente de la Localidad  y viceversa , cuyo multicolor aspecto contrastaba con la inmensidad del verde sin árboles de los campos circundantes.La soleada y calurosa tarde transcurre mientras cada grupo familiar rodea la sepultura de su ser querido,momento de honda  reflexión y recordacion,con el acompañamiento y el auxilio espiritual del Párroco y de las Hermanitas , abocándose además a dejar testimonio reemplazando  las descoloridas flores de papel dejadas el año anterior ,colocando en su lugar  coronas y ramos de nueva hechura junto con las flores frescas.Pasada la media tarde cerca de las cinco,los niños compartimos las naranjas que el Padre Carballo ha llevado para calmarnos la sed (no había agua en el lugar)para luego emprender el regreso, la alargada fila de caminantes recorre el camino inverso,nuevamente a campo traviesa hay que subir la loma y luego todo es descenso,cuesta abajo se hace mas llevadera la caminata favorecida por  que hay menos cosas que trasportar,lo mas pesado y voluminoso quedo en el Cementerio.El día llega a su fin y al año siguiente se repetirá el ritual del dia,no por muchos años mas,la construcción del Cementerio Nuevo y el cambio paulatino en las costumbres harán menos multitudinaria la celebración del Día de los Muertos ,que pasa a ser un día hábil mas y ya no habrá necesidad de recurrir a las habilidades de Doña Lucia,pues la flores sintéticas han hecho su aparición.

(x)Un Cementerio muy humilde,ubicado entonces frente al campo de Ciancaglini y cercano al de Small apenas un solar de terreno rodeado por una alambrada,sin vegetacion ni construcciones relevantes.